jueves, 26 de noviembre de 2009

Permíteme querido García Marquez que cambie hombre por mujer porque también una mujer así es exquisita para mi.

EL DULCE SABOR DE UNA MUJER EXQUISITA
(por Gabriel García Márquez)

Si aún no ha pasado el bisturí por tu piel,
si no tienes implantes de silicona en alguna parte de tu cuerpo,
si los rollitos no te generan trauma,
si nunca has sufrido de anorexia,
si tu estatura no afecta tu desarrollo personal,
si cuando vas a la playa prefieres divertirte en el mar y no estar sobre una toalla durante horas,
si crees que la fidelidad sí es posible y la practicas,
si sabes cómo se prepara un arroz,
si puedes preparar un almuerzo completo con postre,
si tu prioridad no es ser rubia a como de lugar,
si no te levantas a las 4:00 a.m. para llegar primera al gimnasio,
si puedes salir con ropa de gimnasia tranquila a la calle un domingo, sin una gota de maquillaje en el rostro...
ESTÁS EN VÍA DE EXTINCIÓN... Eres una mujer exquisita!

Una mujer exquisita no es aquella que más hombres tiene a sus pies;
si no aquella que tiene uno solo que la hace realmente feliz.
Una mujer hermosa no es la más joven, ni la más flaca, ni la que tiene el cutis más terso o el cabello más llamativo;
es aquella que con tan sólo una franca y abierta sonrisa, con una simple caricia y un buen consejo puede alegrarte la vida.


Una mujer valiosa no es aquella que tiene más títulos, ni más cargos académicos;

Una mujer exquisita no es la más ardiente (aunque si me preguntan a mí, todas las mujeres son muy ardientes... y los que estamos fuera de foco somos los hombres);
sino la que vibra al hacer el amor solamente con el hombre que ama.

Una mujer interesante no es aquella que se siente halagada al ser admirada por su belleza y elegancia; es aquella mujer firme de carácter que puede decir NO.

Y un HOMBRE... UN HOMBRE EXQUISITO es aquel que valora a una mujer así.
Que se siente orgulloso de tenerla como compañera...
Que sabe tocarla como un músico virtuosísimo toca su amado instrumento...
Que lucha a su lado compartiendo todos sus roles, desde lavar platos y tender la ropa, hasta devolverle los masajes y cuidados que ella le prodigó antes...

La verdad, compañeros hombres, es que las mujeres en eso de ser 'Muy machas' nos llevan gran recorrido...

¡Qué tontos hemos sido -y somos- cuando valoramos el "regalo" solamente por la vistosidad de su empaque...!

Tonto y mil veces tonto el hombre que come mierda en la calle, teniendo un exquisito manjar en casa.
Gabriel García Márquez

8 comentarios:

María dijo...

Encantador. Encantadoras.

guada dijo...

es lo mejor que he leido esta semana, precioso, me lo voy a copiar
me encanta
un beso

Tanais dijo...

Me ha encantado!!!!

Lucía dijo...

Y mira que yo le tengo manía desde que en un curso me obligaron a leer "La Hojarasca", pero en este texto se ha salido.

Besitos

MEMORABILIA GGM dijo...

Sioento mucho decir a todos los fans de este blog, que ese texto tan cursi no lo escribió Gabriel García Márquez.

Ripley dijo...

MEMORABILIA GGM: si no es suyo ; ¿ de quién es? tu afirmación debería ir acompañada de ese pequeño dato...pero te agradezco tu comentario desmintiendo la autoría del texto aunque sigue siendo igual de bello.gracias por tu visita

Juli Gan dijo...

Qué bueno! Está bien. Me recuerda a aquél que daba las gracias a Camilla Parker Bowles, porque una tía "fea" fue capaz de ser como es y conseguir un príncipe (Aunque sea Charles)dando alas a miles de mujeres que reivindican ser naturales, y por lo tanto, exquisitas.

pyxis dijo...

Cuantas verdades en estas palabras. Es grato de tanto en tanto ver que aún quedamos eternos enamorad@s.
Besos transoceánicos...