lunes, 28 de noviembre de 2016

Pequeños placeres



Siempre he dicho, y mantengo, que no me gustan las películas de Star Wars, pero he de reconocer que han sabido rentabilizar el merchandising como ninguna otra película. Y ahí es donde al final he caído. 

Hace ya muchos meses , en un día de tía y sobrino, buscábamos un libro que mi sobrino quería , es un  gran lector y mirando libros, también acabamos mirando bolígrafos , cosa que ya él también ha empezado a coleccionar. Me pidió esos bolis pero confieso que el hecho de que fueran de Star Wars no me motivaba para comprárselos así que el tema fue pasando y pasando hasta que hace poco me pidió el boli de nuevo y casualidades de la vida, el gran Black Friday estaba ahí para que yo fuera a comprar un libro para mi, el nuevo de Ildefonso Falcones que continua a La catedral del Mar, que leía 
vorazmente hace unos cuantos años. 

En fin, todo eso para acabar confesando que he comprado los bolis, y digo bien en plural , porque uno es para él, ha escogido el negro , y el otro para mi...

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